Quizás un autónomo o empresa unipersonal no necesite usar nada más que Excel para hacer facturas y llevar un control de clientes, productos y citas. Aquí la contabilidad no es muy complicada y es habitual delegarla en un gestor externo. Básicamente se reduce a un control de gastos e ingresos que suelen pagarse y cobrarse a la vista.
Pero cuando hay varios trabajadores en la empresa, suele haber alguien se encarga de gestionar las compras, los pagos, las facturas, las nóminas, etc. En este caso las empresas usan algunos programas de contabilidad que les facilitan mucho todas esas tareas.
Programas de gestión más utilizados
Hay muchas opciones gratuitas y de pago en el mercado. La mayoría realizan las tareas básicas para gestionar tu empresa. Los programas de gestión más utilizados son:
- Contaplus.
- Contasol.
- Senior Conta.
- Contasimple.
- Visionwin.
Aunque algunos de estos sean gratis cumplen su función perfectamente. Los de pago se pueden personalizar un poco más y adaptarse a las peculiaridades de cada empresa.
Cuándo pasar de un programa de contabilidad a un ERP
Cuando el negocio empieza a crecer y también lo hace la organización todo se complica: más clientes, más facturas, más datos, más empleados… Se necesita un software que pueda gestionar todo ese volumen de trabajo extra y que no te robe tanto tiempo.
Aquí es cuando se vuelve imprescindible hacer uso de un ERP (Enterprise Resource Planning). Un ERP es un programa que se encarga de gestionar las tareas administrativas de los diferentes departamentos de una empresa.
Con un ERP se consigue llevar un control más exhaustivo de todos los procesos. Sincroniza los datos de todos los departamentos. Puede crear alertas de compra cuando baja el stock de cierto producto o generar facturas automáticamente con cada venta, por poner algunos ejemplos.
Diferencias entre un ERP y un programa de contabilidad
Cualquier software de contabilidad se puede instalar individualmente en un ordenador. Incluso se puede usar en varios, si lo van a usar varias personas. También puede incluir funciones para gestionar otras tareas relacionadas.
Pero la gran diferencia es que un ERP integra muchas más funciones. Además de la contabilidad controla muchos otros parámetros relacionados con los clientes, los empleados y el almacén, entre otros.
Ventajas de usar un ERP
Las principales ventajas de estos sistemas son:
- Se unifica en un mismo soporte toda la información de la empresa.
- Integración de todas las bases de datos (clientes, empleados, almacén…) en un solo sitio.
- Ahorro de tiempo y costes. Aumenta la productividad. Se automatizan muchos procesos recurrentes ahorrando tiempo y costes.
Además, un ERP es escalable. Es decir, que se instala para cubrir las necesidades de la empresa en un momento dado, pero si estas cambian se puede adaptar. En muchos casos el ERP permite instalar módulos adicionales para ampliar sus funciones.
Como ves, un programa de contabilidad o gestión puede realizar muchas tareas fundamentales en la gestión empresarial. Pero un ERP tiene más ventajas. Puedes integrar todos los departamentos de la empresa en un solo programa y compartirlo con todos los empleados que realicen tareas administrativas.