La gestión empresarial no es una tarea sencilla y además está dividida en diferentes áreas.
Tradicionalmente, las diferentes áreas empresariales han utilizado diferentes herramientas para su propia gestión. En el mejor de los casos, estas herramientas se basaban en algún tipo de software de gestión empresarial, o en sencillos utensilios ofimáticos.
La descentralización de información, y la falta de integración de dichas herramientas, conduce a situaciones de falta de productividad y falta de integridad de la información, con el consiguiente impacto negativo en la toma de decisiones y en la gestión general de la compañía
De ahí que en los últimos años los sistemas ERP se haya posicionado como la mejor herramienta para poder gestionar y planificar los recursos empresariales de una manera mucho más eficaz y eficiente.
¿Qué es un ERP?
Se trata de un software de sistema que es capaz de integrar los diferentes departamentos que hay dentro de una empresa. Esto ayuda a centralizar y unificar todos los datos de forma que los mismos estén a disposición de cualquier miembro de la organización.
Esta gran base de datos mejora de forma notable la gestión de la empresa y la colaboración entre departamentos y empleados, lo que a la vez se traduce en una mejora de la productividad.
Consigue reducir las duplicidades, evitando que diferentes trabajadores tengan que introducir los mismos datos más de una vez. Toda la información recogida no sólo hace más fácil la gestión, sino que agiliza el proceso de toma de decisiones por parte de la dirección.
¿Qué ventajas tiene el ERP para la empresa?
- Ayuda a ahorrar al conseguir una gestión más eficiente de los recursos.
- Mejora el acceso a la información dentro de la empresa.
- Aumenta el rendimiento de la empresa.
- Incrementa la productividad de los trabajadores al automatizar ciertos procesos.
- Agiliza el proceso de toma de decisiones.
- Se puede personalizar.
- Los datos permiten hacer planificación de cara al futuro.
- Puede ayudar a mejorar las relaciones con los clientes en áreas como el servicio de atención al cliente o la gestión comercial.
Características del sistema ERP y módulos básicos
Sin lugar a dudas la característica más destacable es su capacidad de personalización. Cada empresa puede tener un software de gestión que se adapte perfectamente a sus necesidades.
El sistema modular que usa esta herramienta permite ir insertando diversas funcionalidades según se vayan necesitando las mismas. Es más, los módulos se pueden ir añadiendo tiempo después de haber hecho la instalación del sistema. Es decir, que el ERP puede crecer de forma progresiva, es totalmente flexible y versátil.
Pero la capacidad de personalización de este software de sistema va más allá. Dispone de funciones configurables, de modo que es el propio usuario el que puede programar los módulos que necesite.
Uno de los sistemas más populares es NAVISION, especialmente pensado para las pymes y totalmente personalizable. Es capaz de integrar todas las áreas de un negocio, contando a la vez con las últimas funcionalidades como la gestión desde dispositivos móviles.
Usos más habituales de esta herramienta
Este sistema se puede utilizar en muchas áreas de la empresa. Es muy frecuente su uso en:
- Gestión de almacenes.
- Área financiera.
- Área comercial y de ventas.
- Gestión de la cadena de suministro.
- Departamento de Recursos Humanos.
El sistema ERP tiene tantos beneficios y tantas funcionalidades que a día de hoy es una herramienta imprescindible para las empresas. Es cierto que su instalación requiere de una alta inversión, pero los beneficios que se consiguen son tan amplios que dicha inversión se amortiza rápidamente.